Señales y Tarna, paraíso blanco

Un pequeño paraíso blanco, para amantes de excursiones en raquetas de nieve o esquís de travesía, se esconde tras lo alto del Pº de las Señales y de Tarna en el Alto Porma.

Scouteando el horizonte sobre la Sierra de Mongayo

Uno de nuestros lugares favoritos, cuando el reloj aprieta es Tarna, dada su cercanía y comodidad para llegar desde Boñar.

Antes de llegar al Pº de las Señales tenemos varias opciones:

• Subir a la caseta del guarda por las Brañicas y bajar por la Majada de las Vacas o viceversa.
• En la curva del Sestil del Páramo, entrar en el Valle de los Carros y subir a lo alto de la Sierra de Mongayo. Eligimos el itinerario más adecuado dependiendo de las condiciones y vertientes: heladas, exposición al sol, inclinación…

También en lo alto del puerto de Tarna tenemos 2 clásicas opciones:

• Pico Remelende (1888m): ascendiendo por la suave ladera Suroste y descendiendo por la escarpada Sur.
• Pico Lago (2009m): Subir por el espectacular pinar de su ladera Norte, continuando por su cordal Noroeste para hacer cima. Bajar por su Norte más abrupta o por donde subimos dependiendo condiciones. Cuando el reloj y las condiciones lo permiten, hay opciones de bajar hasta el fondo del valle de Riosol, haciendo una de las esquiadas mas largas e interesantes en este pequeño rincón de la Cordillera Cantábrica.

Hay que añadir que, teniendo tanta variedad de opciones en un espacio tan coqueto, incluídas las que no se mencionan, es muy difícil fallar la elección para una buena esquiada en las mejores condiciones.

Sin lugar a dudas, Señales y Tarna es un paraíso blanco para los deportes de invierno.